martes, 19 de marzo de 2013

Mitos eróticos de infancia y preadolescencia.

Ahora que han salido en la Maxim las ya famosas fotos de Danielle Fishel aka Topanga, aprovecho para escribir sobre mis otros mitos eróticos de infancia y pre-adolescencia. No sé por qué soy bollera, pero la enfermedad me la inocularon a muy tierna edad. Espero que les guste este paseo nostálgico por los 90.

Yasmine Bleeth, Caroline en Los vigilantes de la playa: Yo era muy pequeña, pero ya sabía apreciar el poder de una morena de turgentes senos.
Me puedes vigilar cuando quieras, guapa.
Vanessa Martín, presentadora de El club Disney: Qué tiempos aquellos, en los que nos plantábamos delante de la tele a ver Telecinco y ponían cosas guays como El club Disney. Yo, a parte de disfrutar con los dibujos, estaba muy in love de esta mujer. Qué sé yo, mis ojos infantiles la veían muy bella.

Las gemelas Olsen: Mucho tiempo antes de dar grimita, cuando hacían sus series en las que siempre tenían el mismo personaje pero con nombre diferente. Yo era Team Mary Kate. Luego se me volvió yonki anoréxica, qué le vamos a hacer.
Antes de que me llamen pederasta, tenía la misma edad que ellas.
Jessica Biel en Siete en el paraíso: ¿Quién se pegaba a la tele todos los domingos (creo) para ver esta cursi serie sobre lo chachi que es dios? ¡Yo! Y mira que tuvo temporadas. Pues ahí estuve yo, en plan fan, hasta el final. Aún no sé muy bien si me gustaba de verdad, o la veía por Jessica Biel. Que por cierto, está claro que en las serie hacía de bollera que aún no sabía que lo era. No era normal lo mal que le iba con todos los chicos, y siempre los dejaba por tontadas. La pobre, con la familia que tenía es normal que estuviera reprimida.
Estaba en la fase de estar siempre en chándal que pasan algunas bolleras.
Fran Drescher en The Nanny: Apenas me acuerdo de la serie, así de pequeña era cuando la veía. Pero sí tengo el recuerdo de pensar que Fran era muy guapa, y que quería que viniera a cuidarme a mi. Aquí no sé si hay algún tipo de complejo de Electra implicado.
La verdad es que hoy en día es una MILF.
La Doctora Quinn: Igual que en la anterior, apenas tengo recuerdo de la serie, pero sé que me parecía de una belleza excepcional. Ahora siempre que la veo en esos telefilmes de Antena 3 los domingos siento nostalgia y cariño. Aquí lo del complejo de Electra debe ser más grave, porque esta mujer no es guapa la mires por donde la mires.
¿Qué coño me pasaba en la cabeza?
La Sirenita: Vamos a ver, una pelirroja que se pasa toda la película medio en bolas. Yo era pequeña, pero tonta no.
Esta escena era para provocar.
Bella, de La bella y la bestia: Me parecía muy guay que le gustara tanto leer. Yo es que de pequeña me pasaba la vida leyendo. Luego llegó Internet y se jodió todo.

Nala, de El rey león: No, no, no, nada de escandalizarse. No me jodan, que los de Disney nos incitaban a la zoofilia, haciendo a esos animales tan guapérrimos. Nala de adulta estaba muy buena. Y Simba también, con ese pelazo.
Prometo que no me toco viendo documentales de la 2.
Kimberly Hart: O sea, la Power Ranger rosa. He buscado el apellido en Google para hacerme la guay. Aunque claro, al decirlo he jodido el efecto. 
Recuerdo que en el recreo jugábamos "a los Power Rangers", y todas las chicas se peleaban por ser la rosa. Yo esperaba pacientemente a que terminaran las discusiones y negociaciones, porque yo no quería ser ella, yo quería ser su novia. Secretamente, claro. Luego siempre era el Power Ranger negro, porque soy africana, y me gustaba el color negro.
Mírala qué mona, con su peto vaquero.
La amiga de Sabrina cuando se fue a la universidad: O sea, Soleil Moon Frye, Punky para los amigos. O cómo pasar de querer ser como Punky a querer tirártela.

Portia de Rossi en Ally Mcbeal: Pocas veces me he quedado tan hipnotizada ante una pantalla como cada vez que ella aparecía en un capítulo de Ally Mcbeal. Aquí ya estaba en la edad en la que empezaba a sentir cosas en las bragas al verla, y me confundía no tener esos sentimientos por los portadores de penes.
Ah, sí, lo de que siempre fuera en traje no ayudaba. Groarr.
Mel C: Como buena bollera, fui megafan de Mel C. Tenía mi habitación empapelada con posters suyos. Tengo un bonito recuerdo de leer una consulta que hizo una angustiada adolescente a la Superpop, con la que me sentí muy identificada. La susodicha teenager estaba muy preocupada porque le gustaba mucho Mel C, le parecía muy guapa, y creía que lo que sentía por ella significa que podía ser lesbiana. ¿Lo mejor? La respuesta de la Superpop: "No te preocupes, eso que sientes es normal a tu edad, es admiración, porque quieres ser como ella." LOS COJONES. Amiga bollera que escribió a la Superpop, si me lees, que sepas que no estabas sola.

Vaya unos tatuajes de bollera que me lleva.
Piper en las primeras temporadas de Embrujadas: Digo en las primeras porque después Embrujadas me interesaba lo mismo que los rituales de apareamiento de las cucarachas. Además, que luego entré en esa etapa en la que estás más salida que el pico de una plancha, y claro, estaba más pendiente de otros dos personajes de la serie: las tetas de Phoebe.
Y pensar que años después iba a parir a la cansina de Aria.
Xena: Por supuesto, no podía faltar el icono lésbico por excelencia. En su caso no sé si tenía más ganas de casarme con ella o de ser como ella. El caso es que ahí estaban mis sentimientos infantiles lésbicos. Si eres lesbiana y no estabas enamorada de Xena, que sepas que no mereces vivir.
¡Essse cuerpo guerrero!
Dana Scully: Creo que nunca he estado tan enamorada de un personaje como lo estaba de ella. La fangirleaba de manera enfermiza, años antes de que existiera tumblr para hacerme sentir un poco normal por ello. Recuerdo que media hora antes de que empezara el capítulo me plantaba delante de la tele, ¡y me ponía nerviosa! En parte influía que era una friki de mierda, y me fascinaban los extraterrestres, y los fenómenos paranormales, pero también era por verla a ella, con esos ojos azules que me tenían enamorada, y lo sexy que me parecía hablando de sus cosas científicas, y diciéndole a Mulder que era un flipado.
Muéstrame la verdad Scully, ¡muéstramela!
Buffy y Faith: ¿Pensaban que me iba a olvidar de mis cazavampiros favoritas? La verdad es que Buffy me gustó desde el principio, pero cuando apareció Faith no ayudaba nada a mis confusos sentimientos adolescentes esa tensión sexual no resuelta que tenían.
Una de las escenas con mayor tensión sexual de la historia de la televisión.
Y como ha sido la inspiración para escribir este post, no podían faltar las fotos de Topanga. 




lunes, 18 de marzo de 2013

Shippeo vintage: Marlene Dietrich y Greta Garbo.

Marlene Dietrich y Greta Garbo se conocieron 1925 en Berlín, durante el rodaje de The joyless street, en la que Garbo aparecía, y Dietrich tenia un pequeño papel.

Greta, era un poco pueblerina, y Marlene una bollera espabilada, que la llevó por los bares de gays y lesbianas, los cabarets  y todo tipo de antros de perdición del Berlín post I Guerra Mundial. La pobre Greta no estaba acostumbrada a estas cosas tan liberales, pero ahí estaba Marlene para ayudarla a que se abriera, de piernas incluido. Su affair duró poco, porque Marlene Dietrich era una mala pécora.
Los celos que le produjeron el rápido ascenso de la estrella de Greta Garbo hicieron que se dedicara a contar chismorreos personales sobre la Garbo a todo el que quisiera escucharla. Qué malvadas somos las bolleras, de verdad.
Haciendo gala de una elegancia y un saber estar impresionante, se burlaba de ella por sus orígenes de campesina poco glamourosa, incluso en su grupo de amigos. Les contaba que tenía la ropa interior sucia. Pues tú bien que le comía el coño, guarra.
Garbo, la pobre bollera inocente de esta historia, estaba herida, y perdió el contacto con Marlene. Cuando ambas fueron a trabajar a Hollywood, una amiga mutua negoció un trato: no hablarían nunca la una de la otra, ni contarían ningún secreto de la otra. Pacto que parece ser que cumplieron hasta la muerte. Es que en Hollywood no están bien visto estos escándalos, pero si son entre desviados menos aún. Eso sí, la Marlene siguió follándose todo lo que pillaba, tuvieran pene o vagina. Marlene era una fucker.
Pose de fucker.
Veinte años después de la humillación a la que sometió a la Garbo, Dietrich propuso un encuentro en territorio neutral, que fue arreglado por Orson Welles. Marlene se pasó la noche alabando a Greta, claramente quería volver a follársela. Las bolleras somos así, es ver que nuestra ex está bien y queremos volver a comerle el coño de repente. Pero Greta pasó de su culo muy elegantemente. Porque Greta era muy elegante. Era bollera, pero no una bollera cualquiera, era una señora. 
No hay constancia de que se volvieran a ver.
Marlene durante toda su vida negó haber participado en la película en la que, supuestamente, conoció a Greta. Pero no sólo es cierto que aparece, sino que incluso comparte una escena con Greta Garbo, en la que esta cae desmayada en sus brazos.
Qué romántico forma de conocerse.
Ay, Marlene, me desvanezco, agárrame con tus fuertes brazos de bollera.

No inventes, Marlene, que esta eres tú.

Ya de vieja le reconoció a un amigo, el fotógrafo David Brent, que sí que había salido en la película. También a un grupo de amigos les contó que Greta tenía un clítoris descomunal.
Ay, si hubiera existido tumblr esta habría sido una historia muy divertida. Con los shippers, los haters, las historias poco elegantes sobre el clítoris de Greta. 
Gardietrich, habría sido su nombre de shippeo.

jueves, 20 de diciembre de 2012

¿Y qué hacen dos tías en la cama?

¿Por qué son tan familiares los términos "activo" y "pasivo" en el mundo marica, y en lo que respecta a las bolleras jamás se aplican? ¿Es que no existen las bolleras activas y pasivas? ¿Nosotras no desempeñamos roles en la cama? ¿Somos todas versátiles? ¿O sólo hacemos el amor así despacito mientras suena Unchained Melody?
Creo, queridas amigas, que el hecho de que no se utilicen estas palabras al hablar de sexo lésbico se debe a eso de que somos mujeres, y estamos más interesadas en la relación imaginaria entre Quinn y Rachel que en el sexo.
Cualquier adolescente que empiece a sospechar que lo que le pone contento en los pantalones es ver a maromazos desnudos, no tendrá más que hacer una pequeña búsqueda en Internet y se encontrará con infinidad de portales como Bakala, en los que si no tienes una instantánea de tu pene como foto de perfil no eres nadie. Ellos van a lo que van, sin disfrazarlo de amor, y eso es algo muy loable. 
Además, tienen una industria pornográfica potente (insertar aquí chiste fácil) y realista, y eso es crucial en el desarrollo psicosexual, que lo sé yo.
Nosotras, cuando nos empezamos a plantear que somos más de vaginas, nos registramos en webs que con suerte nos proporcionarán relaciones a distancia poco fructíferas.
Y del porno lésbico (o porno de uñacas desgarravaginas) mejor ni hablemos. Es tan artificial y poco realista que casi con seguridad nos parecerá mucho más atractivo ver TODA SERIE en la que aparezcan lesbianas.
Así de triste es nuestra vida, mientras nosotras nos emocionamos por ver a dos tías dándose un besito pequeñito, los gays de nuestra edad ya sabrán al menos diez nombres de pornstars gays.
Yo misma buscaba ávidamente cualquier peli o serie en la que hubiera rollo bollo, aunque fuera más sutil que una hormiga bailando claqué.

Creo que por estas cosas las bolleras, excepto unas pocas afortunadas (que Cher las tenga en su gloria), tardamos más en madurar sexualmente y, por lo tanto, tardamos más en descubrir lo que nos gusta a la hora de follar.
Yo reivindico firmemente la existencia de las lesbianas activas y pasivas (Ojo, no estoy hablando de femeninas y masculinas, no confundamos churras con merinas). Sólo que quizás no son roles tan estrictos como en el caso de los gays. O sí, pero estas cosas es mejor debatirlas delante de una cerveza, sin duda.
¿Y ustedes qué opinan? ¿Existen las lesbianas activas y las pasivas? ¿Somos todas versátiles? ¿El porno bolleril es tan malo que da cáncer? ¿Por qué a tantas bolleras nos gusta el porno marica? ¿Dónde se esconde Carmen Sandiego?

Y si quieres, participa en esta encuesta, así vemos cómo está el percal.

jueves, 13 de diciembre de 2012

Yo también quiero opinar.

La nueva campaña de Desigual ha conseguido el sueño húmedo de todo publicista: Que todo el mundo  hable en las redes sociales de su campaña como si le fuera la vida en ello.
La ropa de Desigual destaca por haber sido confeccionada por una vagabunda esquizofrénica con los trozos de tela que va recogiendo de la basura, y los que le van dando sus colegas vagabundos. Tengo la firme convicción de que así es como surgió la marca.
Por cierto, para ser modelo de Desigual tienes que tener cara de retraso, y no cerrar la boca nunca.




Desigual, destruyendo infancias.

Pues bien, la campaña tiene el mismo nivelazo que la ropa. Vamos, que es una mierda como una casa. Lo que no entiendo es la cantidad de detractoras femeninas que le ha salido a uno de los anuncios en concreto. Veamos sin más dilación la publicidad en cuestión:

En el anuncio podemos ver a una mongola que se quiere tirar a su jefe, y se va probando modelitos mientras va diciendo subnormalidades. Tiene la suerte de estar buena, porque si no a ver quién va a querer follar con ella.

Veo a muchas feministas queriendo ver cosas donde yo creo que no las hay. He leído cosas como que en el anuncio la chica se autojustifica reiteradamente por querer hacer cosas para las que un hombre no tendría que justificarse. Vamos, que si un tío se quiere trajinar a una se supone que está en su naturaleza y no tiene que rendirle cuentas a nadie, mientras que nosotras vamos de liberadas pero tenemos que autoconvencernos de que nos los merecemos. Pues mira, me parece buscarle tres pies al gato. Three legs to the cat.
¿Que la tía se quiere follar a su jefe? Pues que se lo folle. Un pin para ella si lo consigue.
Si el anuncio chirría es porque es malo con ganas, que duele hasta verlo. Es cursi y estúpido, pero como la gran mayoría de la publicidad dirigida al público femenino. Qué le vamos a hacer si nos toman por subnors. ¿Por qué les parece este para lanzar el grito en el cielo, the scream in the sky, y los demás no? Al menos es más natural que muchos otros. Si es que el caso es quejarse.


En otro de los anuncios vemos a una chati probándose modelitos mientras se da ánimos para atreverse a presentarle su nueva pareja a sus padres. En un sorprendente giro, ¡su pareja es otra tía! ¡Por todos los santos, es bollera!
Al igual que la follajefes, esta dice unas cursiladas y unas tontadas que son para darle una hostia con la mano abierta (¿Qué dices de que le va a gustar a tu padre y a sus amigos también? WTF?). Pero oye, ¿a cuántas parejas de bollera felices ves en los anuncios? Bueno, están las de la lejía Estrella, pero esas son a lo subtexto, como Xena y Gabrielle. 
Además, son chicas "normales", sin estereotipos de los que duelen en el alma. Vale que tienen pinta de comer la misma cantidad de coños que Darth Vader, con ese beso fake que se dan, pero tampoco iban a arriesgarse a poner un beso bien dado y que el Foro de la familia tuviera que escribir cosas en su web y todo eso.


Hay otro anuncio, pero es tan monguer que no merece ni que lo nombre.

A mi feminista interior le tocan mucho más la moral otros. Como ese del nuevo Fairy, que es para cuidarse las manos para los tuyos, y obviamente son manos de mujer. Porque ya se sabe que una mujer tiene que estar perfecta para los demás. Y los platos los lavan las mujeres, los hombres están haciendo sus cosas de hombres, y no tienen que cuidarse las manos, ni mariconadas de esas.

O esos de Axe, en los que el problema no está en que los tíos follen mucho, si dijera eso estaría pecando de hipócrita después de lo que he dicho de la toleta del jefe, el problema es que las tías son tratadas como seres totalmente desprovistos de voluntad y conciencia. Lo mismo podrían ser muñecas hinchables biónicas, que harían la misma función.

O los putos anuncios de Activia, en los que sólo aparecen mujeres. Porque los hombres cagan todos fenomenal. Y los que no cagan bien, no tienen problema por sentirse hinchados. Lo que no entiendo de estos es que antes los anunciaba José Coronado. ¿A los hombres se le han resuelto los problemas de tránsito intestinal en estos años? ¿Es que han descubierto una cura secreta? ¿Están los Iluminati detrás de esto?


Vamos, QUE LOS ANUNCIOS DE DESIGUAL NO SON PA' TANTO. Así que venga, dejemos de hacerles publicidad gratuita.

domingo, 9 de diciembre de 2012

Buenorras olímpicas. Parte 2.

Pues aquí estamos otra vez, con las buenorras que hacen deporte como medio de vida. Espero que vengan tocadas de casa, para que no hagan muchas pausas.

Leryn Franco: La verdad es que con este nombre me pegaba más para concursante de Eurovisión, pero es una lanzadora de jabalina paraguaya. ¿Para qué? Paraguaya. Sí, es esa que apareció en la ceremonia de apertura y todos nos preguntamos: "¿QUIÉN ES ESA DE LAS TETORRAS?". En la ronda clasificatoria en Londres quedó en el puesto trigésimo cuarto. Debe ser que las tetas hacen resistencia con el aire y perjudican en los lanzamientos de jabalina.





Liliana Fernández y Elsa Baquerizo: Jugadoras de Voley Playa del equipo español, que forman pareja. Pareja deportiva, en la intimidad no sé a qué se dedicarán. 
No ganaron ninguna medalla, pero nos alegraron la vista con sus carnes al descubierto.




Maria Kirilenko: Tenista rusa, ganadora del bronce en dobles en Londres, junto a Nadia Petrova. Las tenistas rusas, qué filón.




Maria Sharapova: Tenista rusa, ganadora de los cuatro títulos individuales del Grand Slam, y actual Nº2 del ranking mundial de la Women's Tennis Association. 
En Londres consiguió la plata, porque cualquiera gana a Serena Williams con los brazacos que tiene.
Además de guapa es una crack, por eso yo la quiero. Por eso, y por sus gritos orgásmicos.

Tetas.



En esta entrevista habla de sus famosos gritos. Dice que parece un pájaro. No, Maria, hija, suena más bien como otra cosa:

Stephanie Rice: Nadadora australiana que ganó tres medallas en los JJOO de Pekín, batiendo en todas ellas el récord mundial.
No me suelen gustar las nadadoras, porque eso de las espaldacas que se gastan, pero esta es mu' mona.






Jessica Landström: Futbolista sueca que juega en los Djurgardens IF Dam. En los JJOO de Londres el equipo sueco no pasó de cuartos de final, siendo derrotado por Francia. Es abiertamente bóller, así que si tienes dinero para pagarte el billete a Suecia, puedes ir a seducirla.


Equipo de balonmano femenino español: Ganadoras del bronce en los JJOO de Londres en un partido épico frente a Corea del Sur. Cómo sufrieron esas chicas, y cómo sufrí yo viéndolas. Bueno, tampoco sufrí tanto. Ay, qué bonicas.

Eli Pinedo


Beatriz Fernández, o como me gusta llamarla, "La Lexy española".

Carmen Martín



Culito.

Míralas qué monas, celebrando.